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15 octubre 2014

La ULA tomó las calles para exigir más presupuesto

Los gremios de profesores anunciaron que seguirán las movilizaciones de calle para exigir al gobierno los fondos necesarios | Foto: Leonardo León
Los gremios de profesores anunciaron que seguirán las movilizaciones de calle para exigir al gobierno los fondos necesarios | Foto: Leonardo León

Los gremios de profesores anunciaron que seguirán las movilizaciones de calle para exigir al gobierno los fondos necesarios
Profesores, estudiantes, gremios, exrectores, alcaldes y merideños en general marcharon en respaldo Universidad de los Andes en un protesta convocada por la Asociación de Profesores, el Sindicato de Profesionales y movimientos estudiantiles de esta casa de estudios. La movilización tuvo como objetivo rechazar al recorte presupuestario que hizo el gobierno a las universidades autónomas.
La manifestación se inició en la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales, ubicada en el núcleo Liria en la avenida Las Américas, y recorrió calles y avenidas de la ciudad hasta llegar al edificio administrativo de la universidad en la avenida Don Tulio Febres Cordero. La marcha estuvo encabezada por el rector de ULA, Mario Bonucci. 

Luis Loaiza Rincón, presidente de Apula, señaló que el recorte presupuestario es un atropello para el desarrollo de las actividades de docencia, investigación y extensión. La ULA solo dispondrá de 2,5 millardos de bolívares para funcionar en 2015, 37% de la cantidad solicitada. En promedio, todas las casas de estudio del país recibieron 30% de lo solicitado para el próximo año. “Para equilibrar ese presupuesto es necesario recortar cuatro meses de sueldos y salarios, y seis meses de cestatickets, lo que implica que se coloque en peligro la garantía del salario para quienes trabajan en la universidad, y que se limite eimite el funcionamiento de los recintos de educación superior”, indicó.

Gaby Arellano, dirigente estudiantil del Movimiento 13 y candidata a la presidencia de la Federación de Centros Universitarios, también rechazó la medida porque, afirmó, con ello se intenta cerrar la universidad e imponer un modelo político.